A menudo se utilizan diversos materiales en la construcción de modelos arquitectónicos, según el tipo de modelo y los requisitos que debe cumplir. El cartón y el cartón, por ejemplo, son buenos para construir modelos rápidos y fáciles porque son livianos y fáciles de trabajar. La madera es otro material de uso común ya que tiene una textura natural y es fácil de moldear. Styrodur y poliestireno son livianos y rentables, y son particularmente buenos para crear modelos que requieren un alto nivel de detalle.
El acrílico es un material resistente que a menudo se usa para crear modelos con alta transparencia, como ventanas o componentes de vidrio. El papel maché es una técnica utilizada para crear modelos de formas geométricas complejas. La tecnología de impresión 3D permite crear modelos con mayor precisión y detalle, que a menudo se utilizan para presentaciones y visualizaciones. Es importante elegir el material adecuado para el modelo para que sea realista, estable y duradero.